Las adicciones no son el problema, sino el síntoma de no estar viviendo la vida que tú quieres vivir. Es un error centrarte únicamente en el hecho de no consumir, ya que tu mente seguirá prestando atención plena a las drogas.

Cuando comienzas a dar pasos en la dirección de la vida que quieres crear, desde la acción bien dirigida, el espacio que ocupa la relación que tienes con las drogas, cada vez es más pequeño. La contención en muchos casos crea más atención a lo que “debes evitar” que soluciones efectivas y eficientes.

Tienes una gran capacidad de destruir y destruirte. De lo que no eres consciente aún, es que la misma capacidad de destruir la tienes en su totalidad para construir (tangible y emocionalmente hablando), de una manera productiva, estimulante y sana para ti. Únicamente dependerá, en qué lugar enfoques tu atención.

La conducta que adquieres como “adicto” es reproducir una y otra vez la misma mecánica de siempre, ya que existe un “placer” como recompensa. Cuando seas capaz de identificar cómo te sienta realizar acciones nuevas enfocadas a ti y para ti, obteniendo intensidad, productividad y beneficios emocionales, es de sentido común, que seguirás repitiendo esas mismas acciones, que apuntan a construir a la misma vez que te alejan de los consumos.